miércoles, 7 de noviembre de 2012

Una historia violenta

[Review de Drive (2012)]

Por Juan Pablo Pugliese


Drive (2012) es una obra maestra por donde se la mire. Además de estar dirigida de forma impecable, cuenta con una fotografía excepcional, actuaciones excelentes y una banda de sonido que subraya cada secuencia del film a la perfección.

Ryan Gosling es el “conductor”, un hombre hábil que durante el día trabaja como piloto para producciones de Hollywood y durante la noche presta sus servicios a delincuentes que luego de robar necesitan huir del lugar sin dejar ningún rastro. Los problemas comenzarán cuando este solitario se involucre con su vecina y su pequeño hijo.

No es de extrañar que Nicolas Winding Refn  haya ganado el premio a mejor director en la edición de Cannes del año pasado. El realizador danés homenajea a películas de los años setenta y ochenta y deja su impronta en escenas crudas y violentas pero no exentas de una belleza visual única.

De esta manera, encontraremos muchas influencias que van desde el western de Sam Peckimpah, el cine negro, Bullit (1968) de Peter Yates, The Driver (1978) de Walter Hill, Contacto en Francia (1971) y Vivir y Morir en Los Ángeles (1985) de William Friedkin; y hasta Taxi Driver (1976) de Martin Scorsese.

Por lo tanto, Ryan Gosling compone un personaje de otra época. Un anti héroe de pocas palabras que no demuestra casi ninguna emoción hasta que explota y se convierte en una máquina de matar.

Drive es un cuento de caballeros y princesas. La indefensa vecina interpretada por Carey Mulligan necesita ayuda y el conductor hará todo lo posible para rescatarla de aquellos que quieran lastimarla a ella o a su hijo. En el fondo estamos frente a una historia de amor entre dos personas que viven en peligro y que saben que estando juntos nunca podrán estar tranquilos.

Y como en todo cuento en el que hay héroes, aquí también hay villanos. El comediante Albert Brooks da vida a un mafioso que no se detendrá hasta conseguir lo que quiere y acabará con cualquiera que se cruce en su camino. Por otro lado, Ron Perlman es su socio que, aunque con muy pocas luces, es tan temible como el primero.

Párrafo aparte merece Bryan Cranston. Aquel tipo que se hizo conocido por estas latitudes por su participación en la serie Malcom y se consagró en Breaking Bad como un profesor de química devenido en capo de la droga, compone aquí a un mecánico algo maltrecho que consigue los trabajos para “el conductor”, legales o ilegales.

Volviendo al trabajo del director responsable de la trilogía Pusher, Bronco y Valhalla Rising, da rienda suelta a su talento para crear una atmósfera típica del cine de otro tiempo. Mezcla de gore y clase B, ofrece planos equilibrados y secuencias ralentizadas que aumentan la tensión y auguran un desenlace fatal.

La fotografía a cargo de Newton Thomas Sigel es sobresaliente. Alterna escenas cargadas de luz y otras con sombras y muy oscuras que ponen en evidencia que estamos frente a una historia de amor, pero que tiene un lado violento y visceral.

La banda de sonido escrita por Cliff Martinez funciona como acompañamiento y, a la vez, como contrapunto. Tanto en los créditos iniciales como en las escenas que comparte con Carey Mulligan es un subrayado de la situación pero en las escenas de acción otorga una oposición que no hace otra cosa que resaltar la violencia mostrada.

En síntesis, Drive es una obra magnífica que tiene como destino inexorable convertirse en clásico y  referencia para futuros realizadores.


5/5
SI


Ficha técnica:

Dirección: Nicolas Winding Refn
Guión: Hossein Amini
Estreno (Argentina): 1 de Marzo de 2012.
Género: Acción, Drama.
Origen: Estados Unidos.
Duración: 100 minutos
Distribuidora: Energía.
Reparto: Ryan Gosling, Carey Mulligan, Bryan Cranston, Albert Brooks, Ron Perlman, Christina Hendricks.
Web: http://www.drive-movie.com/

1 comentario:

reptilio dijo...

Esta peli es excelente sin duda es de lo mejor del año :D me gusto muchisimo